[CUANDO
LOS FUEGOS SE
ENFRIEN]
mi
ojo despertó al mundo y al universo.
Cuando
contemplé todas las tierras desconocidas
y
sentí un poder profundo en mi interior que ayudó a
todos
a crecer.
Todos
llegaron a conocerme y venerarme tanto,
todos
adorarían la luz tan ciegamente sin saber qué
vendría.
Cuando
los fuegos se enfríen,
cuando
los fuegos ya no ardan con fuerza, la oscuridad
crece.
Cuando
los fuegos se enfríen,
cuando
los fuegos se retiren al mundo sombrío y se
apaguen.
Cuando
mis ojos se cierren,
cuando
el ojo ya no pueda velar por tu mundo
condenado.
Cuando
los fuegos se enfríen,
cuando
los fuegos vean que no queda nada.
Mundos
han ido y venido, dioses ahora olvidados,
guerras
y plagas han azotado el reino de los hombres y
el
hogar de los dioses.
Soy
el ser constante, cada día traigo,
esperanza
o miedo a quienes me esperan, días o
meses
sin fin.
Aunque
es vida lo que traigo, la muerte está cerca,
los
mundos un día me verán acercarme, y luego
desaparecerán.
Lo
que queda de mí, cuando mi fuerza ceda,
y
la luz se oscurezca dentro de mí, en el frío
creciente».
Letra: Dis
Pater.
Edición
final: Jarl Asathørn.