jueves, 27 de febrero de 2020

La Vida de Krevalora - Conociendo a los suegros




Me estaba duchando el poderoso cuerpazo que Rivfader me dio, cuando mi “celu” empieza a sonar… era mi mina que me estaba invitando a una reunión familiar que tenía, y de paso servía para que conociera  a sus viejos… NOOOOO, la peor llamada de todas ¿Quién quiere hablar y conocer a unos viejos que seguramente te van a mirar de arriba abajo y van a sacar conclusiones rápidas sobre ti?... por dentro ardía en llamas, el día estaba como el hoyo, llovía a chuzos, pero,... para que ella no se sintiera mal le dije: “Eeeh, ya… ¿A qué hora voy a tu casa?”

- A las 19:00 ¿Te parece?

- Okey, nos cachamos ricura.

- No te olvides amor de lo que hablamos… no salgas con tus chistes pesados o te pongai a hablar a garabatos…

- Tranquila, labios dulces, nos vemos a las 19:00.

¡A las 19 horas po’ weón!, la hora peeeenca, a esa hora estoy viendo películas jentai mientras me preparo para ir a carretear con mis amigos. 
¡Puta la weá weón!... a las 7 de la tarde es como ir a prekinder de los carretes… lo único que esperaba es que nadie se pusiera weón conmigo, tengo paciencia cero con los aweonaos.

La otra weá era: “¿Cómo rechucha voy vestido?”… casi toda mi ropa es metalera o es para ir de camping, no tengo nada decente pa’ estar con posibles suegros.

Llamé desesperadamente a un vecino que es abogado y le conté la weá, después que el weón terminó de reírse me dijo que me prestaba un traje a todo culo de marca, pero con la condición de que lo cuidara y no lo manchara. El weón tiene buen gusto, se viste como los italianos… tiene pinta el QL…

Después me duché otra vez, porque estaba nervioso y transpiraba más que actor porno… así que pa’ relajarme me dije: “Mmm, un whiskito con hielo no me caería mal”… después de media botella quedé la raja, ya estaba preparado para ir a ver a mi mina, que si no fuera por el cuerpazo que tiene, y porque es seca para el sexo… le hubiera dicho:

- ¿WHAT? ¿A la casa de tus viejos? ¿a las 7?... ¡PICO!

Agarré mi camioneta 4x4 y partí a la famosa reunión, pero para quedar bien me fui a las 5 y media de la tarde, así aprovechaba de tirarle las manos a mi mina, ustedes cachan,… unos buenos besos, agarrar culo, etcétera.

Antes bajar de mi 4x4 me mandé otro trago de whiskito… para seguir relajado.

Yo que me bajo de la camioneta y pasa un saco de wéas a toda velocidad y me moja entero… ¡CONCHA SU MADRE! Menos mal que era una poza de agua limpia la weá. 
Sale mi mina de su casa, me cacha, y se caga de la risa…

- Ja-ja-ja… ¿Qué onda amor?

- Ese chucha de su madre del auto azul que va allá me mojó entero el maraco QL.

- Tranquilo amor, todavía no llega nadie, entra para que pongamos la ropa en la secadora…

La weá se secó rápido… y me puse regalón con mi mina que se veía entera de rica… y para mi mala cuea justo la llaman por celu. Fui a su dormitorio, me senté en su cama y de pronto sentí olor a mierda… me levanto y…

- ¡POR LA CONCHAS DE TU MADRE Y LAS REPUTAS QUE TE PARIERON!

Entra mi mina corriendo y me pregunta:

- ¿Qué weá te pasó ahora?

- ¡Había mierda de gato o de perro encima de tu cama, mira la weá, estoy lleno de mierda en el culo!

- Chuuuucha. ¡El perrito de mi vieja se cagó en la cama weón!

- Estoy lleno de mierda… ¡CAAACHA PO’!

- ¡Amor, sácate rápido el pantalón para que lo ponga en la lavadora! ¡Esa weá no se demora nada! ¡Apúrate!

La weá es que estaba medio en pelotas en su dormitorio esperando que todo estuviera bien antes de que llegara su familia… no era nada chistoso si me pegaba un ridículo ante sus viejos.
Y como la tarde no podía empeorar más, se abre la puerta y aparece la mamá, y yo estaba en bóxer y con la media erección, el whiskito + el pantalón ajustado de mi hembra me habían dejado medio caliente… la onda es que la “suegrita” me queda mirando y me dice:
¿Y tú quién eres? ¿Qué haces en mi casa en esa facha? ¿Dónde está Marcela?

- Está abajo, lavando mi pantalón, su perrito se hizo caca en la cama y yo… me senté en la weá.

- ¡Mamá! ¡Llegaste!... te presento a mi pololo, se llama Krevalora.

La galla me mira con una cara de asesina y me saluda forzadamente.

- Los espero abajo. Marcela acompáñame mientras tu amigo se viste.

Cuando salen del cuarto y de los puros nervios me viene un retorcijón de guata… ¡Exacto! ¡Me dieron ganas de defecar!
Pasé al baño y liberé al Kraken. ¡Fiuf!... ya aliviado del weveo intenté colocarme el pantalón… ¡Y la weá no me entraba!... con el lavado se había achicado el pantalón QL… intenté 4 veces… y a la quinta vez… intenté ponérmelo a la fuerza...

¡SE RAJÓ ENTERA LA WEÁ!
¡CONCHAS DE SU MADRE!

Salgo de la habitación de mi mina y grito: ¡MARCEEELAAA!

Ella sube corriendo y asustada me dice: ¿Qué onda "Kreva"?

- Se rajó el pantalón QL. ¿Sabís qué? Me voy pa’ mi casa.

- No te puedes ir. Te voy a prestar un pantalón de mi hermano. Espérame, no te vayai weón… o te mato.

Yo, ya no daba más con el weveo. Todo me salía como el pico. Quería beber algo pa’ tranquilizarme y en la pieza de mi mina no había ni una weá.

- Toma, colócate el pantalón.

- No estoy seguro de quedarme a la weá. Todo me ha salido como el loli.

- "Kreva", no te puedes ir, les dije a mis viejos que querías conocerlos.

- ¿Yo? ¿Cuándo te dije esa weá?

- Habla sin groserías, por favor.

- Yaaa, ya. Guagua, ¿podís traerme un vodkita o un whiskito pa’ tranquilizarme?

- Okey, pero no te vayai amor. Pobre de ti.

A los 5 minutos me trae un vaso todo cagao de whisky, esa weá no me servía pa’ ná. Yo quería beber un vaso de medio litro. Grrrrrr.

- Ya mi amor, bajemos. Está mi hermana, mi hermano, mi vieja, una tía y mis abuelos. Mi viejo todavía no llega.

En resumen bajé, conocí a todo el weonaje. Y si tengo que ser sincero… la hermana estaba entera de rica… traté de hablar poco porque estaba más nervioso que la mierda y no quería pegarme un pastelazo.

De pronto se abre la puerta y aparece el suegro. Y quedé desconcertado… ¿Dónde he visto a este viejujo antes?...

Suegro: Hola a todos. Disculpen el retraso.

Y aquí me mandé el pastelazo.

Yo: No se preocupe, no discriminamos a las personas con capacidades diferentes.

La weá era una talla.

El ambiente se congeló.

Mi mina se agarra la cara… y el viejo me mira y me dice:

- ¿Y este joven gracioso… quién es?


Continuará…
(Quien me manda a meterme en weás)