Con el paso del tiempo-no tiempo, algunos, terminamos
por cuestionar muchas cosas: desde beber, comer, aceptar, elegir, etcétera.
Esto parte por aprender, conocer, saber… y por último… por cambiar.
Para mí, es el beber y comer…
… me gusta la carne, pero nunca tanto.
Me gusta beber… pero no para decir: nunca, nunca…
creo
en el equilibrio,..
... lo radical, lo extremo lo encuentro falso.
La verdad es que estoy harto de comer carne,... hastiado
de ver destilados,... harto de juntarme con humanos,... harto de hablar, harto de
todo… lean esto.
Flexitarianos,
los "casi" vegetarianos
Puede que seas flexitariano y todavía no lo sepai.
Flexitariano, un término que procede de flexible y
vegetariano, se refiere a aquellos que basan su alimentación en los vegetales,
pero consumen huevos y lácteos de forma habitual y, ocasionalmente, carne y
pescado.
En realidad, los flexitarianos son omnívoros (comen de todo), pero limitan tanto la
cantidad de algunos alimentos como la frecuencia con la que los consumen.
Los vegetales tienen un papel protagonista en su
dieta, pero también los granos integrales, los huevos y los lácteos, mientras
que las carnes - tanto las aves, como las carnes rojas o el cerdo - y el
pescado, normalmente se incluyen una o dos veces en el menú semanal, y en
raciones moderadas (entre 50 y 80 gramos).
Beneficios de
la dieta flexitariana
La flexibilidad y el hecho de que no existan alimentos
prohibidos son grandes ventajas de la dieta flexitariana, que la hacen
atractiva y fácil de seguir (cada persona
se marca sus propios límites y adapta la dieta a su vida, y no su vida a la
dieta) pero, además, tiene otros beneficios como:
Se ingieren menos calorías, menos grasas totales y
grasas saturadas, menos proteínas animales, menos colesterol y menos azúcares
refinados.
La ingesta de proteína de origen animal, especialmente
si se trata de carnes magras o pescado azul, evita la aparición de déficit vitamínico
o proteínico.
Aporta más cantidad de fibra, y al ingerir menos
grasas saturadas se consiguen mejores índices de colesterol y triglicéridos,
por lo que se reduce el riesgo de sufrir enfermedades como obesidad, diabetes o
hipertensión arterial.
Protege el medioambiente, ya que cultivar vegetales es
menos contaminante que la producción de ganado, por lo que una alimentación que
minimice el consumo de carne es más ecológica.
Permite una alimentación más variada que las dietas
vegetarianas y vegana, y es más fácil de seguir cuando se debe comer fuera de
casa o durante la celebración de un evento.
Siempre que se haga con moderación y de forma puntual,
se puede seguir disfrutando de unas costillitas de cerdo o de un buen salmón o
merluza.
Fuente:
Salud y Humor