El dilema de un milico (militar)
Un milico gringo vuelve a su país (U.S.A.) para
conocer a su hijo nacido 3 meses antes,... sorprendido de que su bebé era negro
le pregunta a su esposa:
- ¿Cómo mierda puede ser que tengamos un hijo negro si
soy blanco y tú también?"
- Lo que pasa, mi amor, es que yo no tenía leche y
busqué a alguien que lo amamantara, como la señora era negra, el bebé tomó ese
color, ¿Cachai?".
El milico no muy convencido visita a su vieja (madre)
y le cuenta la historia... y su vieja le dice:
- Claro que puede ser. Yo tampoco tuve leche para
amamantarte y entonces te di leche de vaca y mira que lindos cuernos te están
saliendo ¡¡¡saco de wéas!!!
Una exquisita modelo rubia
Una modelo rubia - entera
rica - llama a su novio y le dice muy nerviosa:
– Hola mi vida, me siento muy triste y desanimada
porque encontré un rompecabezas y no lo puedo armar!!! Ninguna pieza encaja
bien, es imposible! ¡¡¡No sé por dónde empezar y necesito que me ayudís!!!
Entonces el pololo intentando ayudarla le dice:
– Bueno mi amor,... pero debes tener la caja con un
dibujo, ¿no?
– Síii, tiene un dibujo de un tigre saltando y
sonriendo, pero es muy complicada la weá, las piezas son muy parecidas y no lo
puedo armar… ¿me ayudai?
– Bueno, tranquila guagua, si es tan importante pa'
ti, ahora voy para tu casa, te ayudo y entre los dos lo armamos ¿cachai mi
amor?
Cuando llega a la casa de la polola mira la caja,...
... la mira a ella,
... mira las piezas,
... la vuelve a mirar y le dice:
– Mira mi amor, vamos a hacer una weá bacán, ¿Okey?,
metemos las zucaritas en su caja y no le decimos ni una weá a nadie, ¿Qué te
parece?
Una mujer lista y un weveta un poco lento
Un granjero lleva su camioneta al pueblo y el mecánico
dice que tiene que dejarla hasta el día siguiente, así que decide regresar
caminando a su granja, que no queda lejos.
En el camino pasa por la ferretería y compra un cubo y
un tarro de pintura.
Allí, un colega le entrega dos gallinas y un ganso que
le debía.
Ahora nuestro granjero tiene un problema: cómo llevar
todo a casa caminando.
Mientras piensa cómo hacer, se le acerca caminando una
señora madura y le pregunta cómo llegar a la granja de los González; el
granjero le dice que va en esa misma dirección, y que si no tuviera que llevar
esa carga la acompañaría.
La señora dice:
- ¿Por qué no pones la lata de pintura en el cubo?
Lo llevas en una mano; te pones una gallina debajo de
cada brazo y llevas el ganso en la otra mano…
El granjero sorprendido agradece y comienza a
acompañar a la señora. En un momento le dice:
- Conozco un atajo, que nos saca del camino principal,
pero nos ahorramos un kilómetro.
La dama lo mira con desconfianza y responde:
- Soy una viuda solitaria sin un hombre que me
defienda. ¿Cómo sé que no me vas a llevar por el medio del campo, me vas a
poner contra un árbol y vas a abusar de mí?
- ¡Pero señora! Aun cuando quisiera, ¿cómo hago? Llevo
un cubo, una lata de pintura, dos gallinas y un ganso. ¿Cómo hago para
apretarla contra un árbol y abusar de usted?
– Pues, pones el ganso en el suelo, lo cubres con el
cubo, colocas la pintura encima del cubo y …. yo te sujeto las gallinas.
La carta
Juan, un joven soldado en la guerra, recibe una carta
de su hermano que dice que su querido gato había muerto atropellado por un
camión.
El soldado se quedó muy triste y le contestó a su
hermano:
– Querido hermano.
Gracias por informarme la noticia, pero al ser una
noticia tan triste, y yo tan solo acá en la guerra, por lo menos debiste
prepararme un poco para recibir la mala novedad enviándome una carta que
dijera:
“El gato se subió al árbol y no puedo bajarlo.”
Después me enviabas otra carta diciendo:
“El gato se bajó del árbol y cruzó la avenida. “
Y por último, otra carta que dijera:
“El gato volvió a cruzar la avenida y un camión lo
atropelló.” ¿Cachai?
De esta manera hubiera estado más preparado para tan
mala noticia y sufría un poco menos.
Al mes siguiente, Juan recibe otra carta de su hermano
que dice:
“Weón, tu mina se subió a un árbol y no puedo
bajarla…”
Fuente:
salud y humor