«Un árbol con raíces fuertes puede resistir la
tormenta más violenta, pero el árbol no puede crecer raíces justo cuando la
tormenta aparece en el horizonte».
(Dalai Lama)
«Vivimos en una época marcada por desafíos que
parecen incesantes. Los tiempos oscuros que nos rodean son más que un simple
fenómeno; son una profunda intersección de decisiones políticas, crisis
sociales y un ambiente que, a veces, parece estar al borde del colapso.
Nos gobiernan hombres oscuros, figuras que, en lugar de guiar a la sociedad hacia la luz, parecen alimentarse de las sombras. Estas personas, a menudo arraigadas en el poder, toman decisiones que afectan a millones, pero su interés parece distorsionado por el egoísmo y la avaricia. Constantemente somos testigos de cómo sus políticas se desploman como castillos de naipes, generando caos y desconfianza. Es en este contexto que surge una pregunta crucial:
¿Qué futuro estamos construyendo con liderazgos tan
cuestionables?
Los ingredientes para una feroz tormenta están
presentes. Desde cambios climáticos devastadores hasta tensiones geopolíticas,
el mundo parece estar en un equilibrio inestable. Las predicciones sugieren que
lo peor está por venir. En momentos así, es fácil sentir que estamos atrapados
en una vorágine sin fin. Pero, a pesar de la desesperanza que puede inundar
nuestras mentes, hay quienes eligen prepararse para enfrentar lo que se
avecina. La clave está en reconocer que, aunque el panorama sea sombrío, no
estamos completamente desprovistos de herramientas para enfrentar la
adversidad.
Caerán los mares de vidrio, lo que alguna vez fue
sólido puede desmoronarse. Este es un recordatorio de que nada en la vida es
permanente y que el cambio, aunque amenazante, también ofrece oportunidades
para el renacimiento. Quienes han escuchado el eco de la historia saben que
después de cada caída, hay quienes emergen más fuertes y resilientes. En
tiempos de crisis, es vital mirar más allá del pánico inicial y reflexionar
sobre cómo podemos adaptarnos y evolucionar en medio de la incertidumbre.
En este escenario, morirán los perversos, pero no todos enfrentan el mismo destino. Solo aquellos que se han preparado para el infierno, ya sea a través del conocimiento, la unión comunitaria o el fortalecimiento de las conexiones humanas, podrán salir victoriosos. La preparación no solo implica una defensa ante la adversidad, sino también un enfoque proactivo hacia nuevas formas de vida y esperanza. En medio de la oscuridad, es fundamental cultivar la resiliencia, la empatía y la compasión. Al hacerlo, garantizamos que, aunque los tiempos sean difíciles, nunca estemos completamente solos.
Los tiempos oscuros que enfrentamos son una prueba
de nuestro carácter y de nuestra humanidad. Si bien es cierto que somos
testigos de un liderazgo opaco y de retos que parecen insuperables, también hay
una chispa de esperanza en aquellos que se preparan para el futuro.
Al final, la lucha contra la oscuridad es tanto
individual como colectiva. Y, si nos unimos, podemos iluminar el camino incluso
en los momentos más tenebrosos. En esta travesía, recordemos que la auténtica
victoria no radica en evitar la tormenta, sino en aprender a navegar a través
de ella con valentía y determinación».
(Reflexión IV - VDM)
«Si solo una tormenta horrible puede demoler el
castillo del demonio, ¡entonces que la tormenta salga victoriosa! ¡No es raro
que el cielo venga después del infierno!».
(Mehmet Murat ildan)
Fuentes:
Nibiru Conection.
NibiruConection | CF. Pimentel
Mente Abierta.
Noticias Alerta Global.
La Guarida del Lobo.
The People's Voice.
MundoOculto.es
Muchas imágenes fueron editadas, la
mayoría mejoradas y una que otra fue creada por mí.
Edición final: V.D.M.









































