« ¿Para qué tanto conocimiento?
¿Para qué tantas filosofías?
¿Para qué tantas búsquedas?
... en la práctica, la humanidad sigue su viejo
curso de colisión, en medio de mentiras, destrucciones y esclavismo.
¿Para qué explorar el espacio?
¿Aprenderán algo de lo exobiológico que anida en
esferas invisibles sobre sus cabezas?
¿Para qué tanta tolerancia?
¿Los hará una especie libre de angustias y
desenfrenos?
¿Para qué tanta inclusión? – tal vez para seguir la
adoración a Saturno.
Es una vergüenza que en pleno siglo 21 sigan estas
contradicciones enfermizas de una especie que está destinada al fracaso, al
eterno llanto mirando con angustia si alguien de más allá los ayuda, los abraza
o los escucha.
... Es como si creyeran que merecen algo.
Ya nadie lucha ni pelea por lo justo.
Ya nadie observa lo que realmente ocurre.
Ya nadie escucha las palabras sabias.
“La
gleba yacerá en perpetua soledad, todo es un lienzo níveo coronado con una
espesa nébula... podrán olerse el silencio y el crujir de los árboles. Los animales
y aves dormirán, esperando despertar.
Será
la nueva Tierra.
La
extensión será sorprendida por las lanzas del sol.
Será
la muerte de millones de hombres, mujeres y niños, y el inicio de la era fría.
Solo
podrán verse, a lo lejos, caminantes cansinos, buscando refugio, calor y
alimentos”.
Es la purga saturniana… la vieja daga de 6 rostros
que viene por todos.
Nadie quiere escapar de este sino, y algunos, los
seres de las sombras, sueñan con la deconstrucción del viejo mundo, mientras en
un presente-futuro estarán refugiados en sus mansiones que estarán más cercanas
al infierno de abajo».
Foto final:
Amanecer en punta Arenas, parcela privada
Foto tomada por mí.